Jornada de 65 horas

Cada día que pasa me sorprenden más nuestros políticos. Después de siglos de lucha obrera para intentar conseguir unas condiciones de trabajo dignas, después de las luchas del siglo XIX, para conseguir que desapareciesen las jornadas de trabajo maratonianas de 14, 16 o 18 horas, estos señores que según dicen, defienden nuestros intereses, quieren volver a aumentarnos la jornada laboral, nada menos que en 25 horas semanales. ¿Que pasa? Esta gente tiene que meterse algo muy fuerte en vena, porque si no, no se explica que puedan proponer tamaño despropósito. Estamos viendo lo que pasa hoy en día con la juventud, que a causa de la poca atención que reciben de sus padres, condenados a trabajar los dos porque el salario de uno solo no llega para sostener a la familia y estos iluminados, porque no se les puede llamar de otra manera, quieren que les prestemos aún menos atención. Llevamos varios años en que los salarios apenas han subido en relación con los precios, cuando no han estado congelados, como es el caso de funcionarios y de muchas empresas; durante esos años, las empresas han aumentado sus beneficios desorbitadamente, no hay más que fijarse en los índices de la bolsa, de los últimos años, sin que estos multimillonarios beneficios, repercutiesen de manera positiva en el bolsillo de los trabajadores, que en fin de cuentas, somos los que creamos la riqueza del país, ya que sin nuestro trabajo, esos beneficios no hubieran existido. Ahora que ha vuelto el tiempo de las vacas flacas, estos señores que gobiernan Europa, quieren que seámos nosotros los que los saquemos del atolladero, lo vería justo, si los beneficios obtenidos durante estos años, hubiesen sido compartidos con los trabajadores, pero para lo único que han servido, es para aumentar las grandes fortunas y dar beneficios a los fabricantes de yates y coches de lujo. Así que, al igual que ellos se comieron todos los beneficios de la época dorada que acabamos de pasar, que séan ellos los que paguen el pato de la crisis, para algo tienen las arcas llenas, nosotros lo único que tenemos, son hipotecas que nos tendrán esclavizados de por vida, gracias al capitalismo salvaje que nos han impuesto, aunque de esto, los mayores culpables seamos nosotros por habernos dejado camelar con promesas falsas y por querer vivir por encima de nuestras posibilidades. No se vosotros, pero yó, no pienso trabajar más de lo que lo hago, entre la jornada laboral y el trayecto, me ocupa la mitad del  día, si le sumas el tiempo necesario para comer y dormir, ¿Que nos queda? Yó os lo diré, ¡NADA! Y estos señores quieren quitarnos horas de sueño, porque si no, no veo de donde van a salir esas 25 horas más que nos quieren imponer. Espero que reaccionemos a tiempo y no dejemos que nos metan este gol traicionero e inmoral